26 de
diciembre de 2014
Disolución
Pararte frente al árbol que plantaste hace
tres años y pensar…
¡Mañana ambos seremos destruidos!
Sin tristeza veo llegar nuestro final, atado a
la indiferencia
De los espectadores, que no dejan de mirar.
Aun, esperan de entre los muertos, llevarse un
recuerdo.
Algunos mueren para vivir, no fundar
instituciones,
Y algunos viven para simular la muerte,
rodeados de televisores.
¿Y los tibios? Eternamente esperando, que
otros abran el camino:
¿Es esa la luz al final del túnel? Consultan y
tropiezan, piensan, imaginan…
Pero la historia crea, inventa, antes que
pasar páginas en blanco,
Las nuevas milicias de la tala rasa, harán de
la duda, tu última casa.
¿Es que no enseña nada la última propaganda?
Hay que ir al frente
Como moscas, si todo está podrido, como abejas
si una flor resiste,
Y fundar gusanos en la vieja herrumbre atada
al tiempo fijo.
Seculares desacatos, burlescas comadrejas
robando piedras
De los fundamentos mismos del castillo…
y una sonrisa que abrace
A cada guerrero en su piel de bufón, a cada
sirvienta que espera
Un día no levantar el jarrón, ni la mancha del
suelo, mientras escupe
El whiskey con dos hielos. Simular no es
mentir, sino engalanar los días
Apuntando fijo a la libertad, cada minuto
cuenta, cada batalla pasada
Nos convence de morir a dentelladas, y no
quietos con la baba seca
Colgando como una guirnalda, en una cama vieja
y anticuada…
Sin fuerzas para saltar el cerco, temiendo la
oscuridad
Que al fin llega, corriendo. Al bosque,
que es tarde
¡Y la luna llama! Una energía extraña va
trenzando el planeta a rajatabla,
Entre temerosos privilegiados, entre cuerpos
que el pasto tapa,
Entre cubiertos de plata y servilletas bien
dobladas, entre tablas y cañas
De la tierra vuelve el amor de los que
murieron sin dejar de amarla.
Pero la última masacre, no termina de empezar,
con tantos verdugos
Pidiendo seguridad social, esperando de reojo
el golpe que desate
El desbande en sus propias filas, soldaditos
de plástico, como niños
Un día no van a jugar más… aunque hoy haya que
luchar, morir, temer, matar.
Ese día llega lo sé, lo siente mi piel,
naciendo entre cicatrices, mi corazón
Calmo, entregado de antemano, curado con amor
del espanto, pronto
Seremos todos arrasados para forjar, un velo
que nos deje ver la realidad…
¡A los caminos! ¡Vamos, no quiero morir en
casa! Al bosque
…que no es lo mismo dormir en una cuadrada
plaza…
Siempre nosotros
Siempre cometemos el error
De pensar que los demás
Concuerdan con nuestra mirada.
Siempre cometemos el desliz
De asumir que en su vivir
Nos compete el cuándo, cómo y qué.
Siempre cometemos la locura de creer
Que a cualquier problema vamos
A adaptarle nuestras soluciones.
Siempre estamos a punto de pisar
En las trampas que tendimos para otros
Mientras miramos hacia atrás adivinando
Un buitre mayor cayéndonos.
Siempre el corazón
Marcará el rumbo
Cuando no haya más rumbos
Que tomar.
Ta pesado
Gota a gota se escurre el tiempo
Entre las manchas de la pared
Un mosquito espera, una araña mira
Una polilla acecha al foco, más allá
…y la tarde se echa en el suelo
Esperando esa lluvia, que tal vez erre.
Pronostico del clima
Quisiera ser como la noche, que no se detiene
Como el amanecer, que entra antes de llamar
Como las nubes, que saben dónde ir
Impiadoso como el viento, feroz como la lluvia
Quisiera subir a la ciudad, como un tornado…
Ser el sol para verte crecer, cerca de la
vertiente
Que se agota y se renueva en cada estación…
Insomnio
Me miro al espejo, no más que carne de trueque
Destinado a morir sin conmover, sin embargo
No fui ayudante de mi destino, respiro
Aun, tarde he llegado a comprender
Que mis enemigos ¡me conocen mejor que yo!
A la deriva como una boya, desorientado
No hay una costa que no esté en pie de guerra
Y así el horizonte ¿pero en que bando voy a
estar
Que toque al tun tun de mi corazón? Yo solo
caigo
En alas del amor, y en la tierra me olvido de
todo lo que soy.
¡Despertar!
Entre la duda y la inacción, el temor…
Pasa un día más lleno de polvo quieto,
silencio,
Me refugio del sol, del viento…
Encierro del alma que no se anima al incendio.
No es tan malo mirar pasar el tiempo
Y derivar un rato en la corriente, mientras
corre la orilla
Todo es igual cuando no vas a parar, todo
Es lo mismo si no arrancas, pero el tiempo
Arrasa todo con su soplido lento, aunque no
importe
Y las telarañas no dejen despegar mis sueños…
No puedo explicarte lo que estoy haciendo
¡No puedo explicarme lo que estoy haciendo!
Con las patas mojadas en pleno desierto
No sé si estoy estancado o solo retrocediendo
Otra navidad
Un día más de llovizna lenta
El mundo parece detenerse
En el reflejo de un niño gitano
Que llora por sus regalos.
En cada vidriera un atentado
A la lógica, la utilidad, el mismo mundo.
Comamos y bebamos como condenados
Que mañana seremos absueltos nuevamente.
Para todos hoy, hay amor, pero no mires
A los costados, que nadie quiere saber
De qué calidad es el decorado.
Cada esquina vuelta un basural
Demuestra el éxito del centro comercial
Mañana después del brindis, abrazo
…y deseos estériles de felicidad
Cada cual dejara su amor de diez segundos
Para volver a sentarse frente al televisor
Los autómatas no sienten ¡vaya farsa
En que nos han venido a embaucar!
Bien condimentados, a caminar
Por las calles de la ciudad, ignorando
Si hay un día que merezca ser olvido,
Si hay un medio que deba ser preciso,
Si la vida merece sus latidos…
Para no olvidar
¿Cuantos inviernos me comí las semillas de la
primavera?
¿Cuantas ratas oí trotando entre mis patas?
¿Cuánto frio y cuanto calor, cuanta lluvia y
viento afilado
Atravesé caminando para durar un día más?
¿Cuánta basura comí? ¿Cuantos mendigos fueron
padres,
En mi desolación? Y cuantas noches temí, pero
en libertad:
Mirando las estrellas, escuchando, aguantando
el llanto…
Y cuantas veces me chuparon, solo por ser,
aferrado
A los barrotes, encarcelado, mirando el patio,
esperando
Que me suelten, por no tomarse el trabajo…
Cuantos caminos recorrí arrastrando mis pies
cansados
Cuanto di, y cuanto más recibí, sin esperar,
sin pedir, orgullo
De animal salvaje, que mira de lejos el
alambrado.
Recuerdo de nacer y de luchar… la vida en la
cornisa
Mi único lugar, aunque… ¡Soy una persona! ¡Yo
no tengo dudas!
Cuanto silencio por no hablar a oídos sordos,
y cuanta magia
En algunos ojos, y cuantas manos ajenas
fundaron mi esperanza.
Y cuantas mujeres y niños, me salvaron
primero… del naufragio…
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