Migración
Fluctuación ¡Pum! ¡Crash! Me despierta el estallido de la chapa contra la velocidad de la autopista quieta, crish, crish, crish, enseguida una lluvia de cristales, salgo de mi caja, asustado, soñando con armas en mi cabeza… ssssssssshhhhhhhhhhhrrrrrrrrriiiiiiiiiissssssssshhhhhhhhhhhhhhh, ahora va cayendo una catarata de chispas, sin pensar, miro para arriba, sobre la baranda (doblada y ya cayendo, o enrollándose sobre sí misma, durísimo acero) va patinando un camión tanque, con las cuatro ruedas traseras del lado del conductor girando en el aire. Sigue surfeando la curva de la autopista haciendo una ola chirriante de chispas y se detiene finalmente con un gran gong, al final de la bajada, cruzándose como una barricada en la avenida. Recién entonces destacan las intensas frenadas, otros pequeños choques, y después como una orquesta, estallan al unísono llantos, puteadas, gritos, increpaciones y llamadas a dios en todos los tonos. Se lo que significa esto, cróni