Adictos al poder: doctrina, fogón y bala, o lo que llegue primero...
Cuando los adictos al poder del unidiscurso “rebelde” memorizado sienten que ya debería haber llegado su hora y sin embargo es poco para repartir entre todos, cuando los adictos al poder del unidiscurso “tradicional” hegemonizado sienten que les robaron el piso del trampolín justo cuando habían practicado el salto, cuando los propietarios del mundo sienten que no pueden meter el cambio, cuando los piratas internacionales se dan cuenta que pagaron por un puerto que está lleno de barro… …Se terminan las negociaciones y empiezan a ladrar por todos los micrófonos, todos juntos, todos a la vez, todos insultándose al pasar en las concesionarias, en los clubes, en los pasillos, en las oficinas, en las redes virtuales. No alcanzan a ver que el resto de la sociedad empieza a cansarse, que el noventa por ciento de la población no saca ningún beneficio de ganar o perder por sus causas. La inmensa masa de gente que nació y vive acorralada por el sistema y la burocracia, solo pueden