Jardinería Instintiva para Reconstrucción de Zonas de Conflicto
Antes que nada, el hecho de la jardinería, como acción modificadora, práctica, artificial, es un hecho de violencia, de interferencia sobre el devenir natural de las especies, que proviene de millones de años de interacción y supervivencia común y mutua. Como tal, efímero en su esencia, su prevalencia depende de un mantenimiento constante, de una planificación detallada, y de un reajuste permanente de frecuencias, horarios, especies, estructuras, insumos, materiales y metodologías de trabajo, para lograr un resultado estable que exprese claramente los ideales estéticos que se quieren representar. Entonces: dado que un jardín se refleja antes que nada en si mismo, ya que la única historia es su historia, -mas allá de relictos o vestigios que remitan a otra historia u otras historias del predio- debe existir siempre un encadenamiento o contacto entre los diferentes escenarios o etapas, que permitan asociarlo a si mismo. Siempre debe existir, la permanencia en el cambio, el