09 diciembre

Atravesando todo (Poesías)

 

 


Reflexiones desde adentro

 

Como escapar de la violencia

Cuando la escuela fue mirar

Como hacer correr la sangre

Anotando la mejor manera

La que más duele, humilla

Y finalmente asesina, lenta

Un ser humano desde adentro

Hacia afuera, sin redención, sin vuelta.

Como volver a arar la tierra

Si no hay un hierro que no escupa balas

Si no hay ofensa que se borre

Si no hay mirada que no esté afilada…

Cuando cada lágrima se hace rabia

Hasta gotear sangre en rostros lentos

Que se hacen de papel sucio, mojado…

Bajo un sol que naufraga en la tarde.

Como escapar de la violencia

Y dejar a la vez respirando a los cobardes

Que se engañaron invitando a una fiesta

Donde hacían bailar a los miserables

Cuando todo lo que tocan se revira

Como una hoja cayendo en el fuego

Cuando el frio que viene de adentro

Hace incomodas hasta las caricias.

Como escapar de la violencia

Cuando llega la hora de preguntar

¿Que sos?¿ Quien sos?¿ Donde estabas?

Cuando tiraron el primer golpe

Y las cenizas ganaron el cielo

Como un remolino de nefasta alegría

Mientras los buitres, gordos, lentos

Graznaban felices en tu sordo oído.

Como escapar de la violencia

Cuando el dolor del otro no se siente

Y su piel en tiras es solo un cálculo

Y su huida solo un mapa que atrapa

En la ciudad jaula un ratoncito

Que se deleitaba riendo como hiena

Cuando cada callejón oscuro y sucio

Es un escenario corriendo el telón….

Como escapar de la violencia

Cuando se multiplica desde cada célula

Y la sangre pide sangre a gritos

Cuando todo esta errado y no hay forma

De correr o quedarse quieto sin pisar

Espigas verdes que no darán semilla

Cuando los incendios se vuelven poesía

Y las praderas campos de batalla…

Como escapar de la violencia

Cuando solo se ve fortificar trincheras

Cuando la guerra se respira

A través de las rendijas que guardan

Los jugadores esperando el sonido

De la primera macabra campanada

Que libere la tensión acumulada

En años de morder paredes descascaradas.

 

 

 

El nuevo Big Bang

 

Durmiendo bajo una fina capa de piel

Quedaron las cicatrices que te vieron nacer

Atravesando todo desde el fondo del mar

Como una burbuja, sin más opciones

Que reclamar la esencia que te fue negada

Arrasando formatos que no contemplan

Tantas partes de tu cuerpo mágico ancestral

Cruzando un río que no ofrece piedras donde pisar

En la oscuridad, tiritando, hacia la brisa de una mañana

Que se anuncia pero no llega, que avanza pero demora…

Un universo tras otro: la luz, que no se ve pero se crea

 En la confianza que lleva a dejar las armas y luchar

Determinadas a existir y vivir, como si fuera posible

No ser parte del cuchillo ni del pastel, fijamente

Desde afuera de la mesa construyendo en el aire

Un soplido lento que derribe los viejos cimientos

De la matriz que edifica nuevas torres de babel.

 

“Un poema”

 

Un poema nace del silencio, que alimenta la oscuridad…

Cuando la cámara cuelga y no hay fotos que sacar.

Y  miramos la punta del lápiz, el pelo del pincel, sin poder

Encontrar el trazo, ni el color que refleje alrededor…

Cuando los extremos se entrelazan en una soga

A la que alegre ira a colgarse nuestra racionalidad.

 

Rutinización.

 

Cada noche y cada dia

Trae nuevos desafíos

Que como arañas trepan

Por los pies del destino

Mientras bailamos como sordos

Simulando estar vivos…

 

 

Dos palabras

 

Un imperio de papel  

Se quema a fuego lento:

Un buque en la orilla encallado

Que simula naufragar…

Para lanzar su S.O.S.

Como hormigas a la miel

Llegan a través de los restos,

Navegando sus tormentas

Marineros de charco,

Mercenarios de alcoba.

A la caza del futuro

-Que tironea desde el septum-

Como una flecha

Que se clava siempre

En el mismo blanco

 

 

Tiempos por venir

 

Se escucha venir en el viento

Un ruido pequeño y suelto

Como una gotear en la lata

Que ansiosos miran los perros

 

Antes que tiemble el suelo

Ante el rumor del silencio

Que antecede al campo quieto

Arrasado de fugitivos…

 

En la inmóvil noche franca

Donde algunos desbarrancan,

Se ahorran hasta en las velas

Para afilar los cuchillos.

 

Caminando en los salones,

Con sangrantes pies descalzos,

Tanta rabia silenciada,

No necesita palabras…

 

Como el signo de los tiempos

Que antecede a la tormenta

De los campos descartados

Nacen primaveras negras…

 

En salones olvidados

Donde ya no se reunían

Los señores van y vienen

Con un temblor en su espalda

 

Y finalmente entre el humo

De las primeras batallas

Se ven mirando el caldero

Al que a tantos empujaron…

 

 

Al cielo

 

Cuando bailan los soldados

En medio de dos batallas

No es por festejar la muerte

Sino por permanecer vivos

Sabiendo que aun mañana

Su vida no valdrá nada…

Cuando agradecen las balas

Requechadas al convoy

No es por no ver los cuerpos

Hechos grotescas hilachas…

Sino porque tanta muerte

Trae a remolque el mañana.

Cuando el susurro del viento

Solo corrige la mira, y tiran

No hay belleza en las colinas

Ni en la acacia solitaria,

No existen las mariposas

Pero si el soplo de la vida.

Permanecer es un arte,

Sobrevivir un destino,

Las cuentas también se pagan

Si se perdona al enemigo…

Luchar, es, la única manera

De expresar amor, en la guerra.

 

 

Si ella fuera un barco, yo sería el mar

Si ella fuera el mar, yo sería la roca

Si ella fuera roca, yo sería el cangrejo

Si ella fuera el cangrejo, me gustaría

Ser esa pizca de alimento unicelular

Si fuera ella ese diminuto plancton

Yo sería la ballena que lo atrapa

Con la boca abierta de par en par

Si ella fuera la ballena, sin dudas

Treparía al barco que sale de pesca.

 

Corrientes…

 

Nadar y nadar, sin descanso…

Sin reparo, sin mas que…

Un horizonte chato.  Y el temblor

En la superficie del agua, que el viento

Arremolina arriba, como abajo

Revuelve todo, la oscuridad del fondo

Que promete: no rendirse antes y…

Solo seguir adelante, como si hubiera

Todavía una meta intacta, donde

Levantar los brazos, descansar…

Y llorarse de tanto viaje sin final.

Pero la orilla verdosa, no siente

La angustia de los viajeros dejando

Su morada atrás, ni la ansiedad

De conquistadores inertes, indiferentes

Al juego de la vida y la muerte, y ahí:

Cuando todo esta finalmente a tiro

De las ultimas brazadas, lerdas, pesadas

Vale mas entregarse y seguir el viaje

En la turbia agua endurecida de sal,

Que la pendiente promete llevar

Hasta el fin de los conceptos esperables.

 

Retiradas

 

No importa cuántas efímeras guerras

Recorran el mundo como una mancha negra:

En las ciudades destrozadas cantan los pájaros,

En los cráteres sobre los campos brilla nuevamente

El intenso verde de los primeros tréboles tempranos.

Y en el barro seco de pedazos de botas acribilladas

Sopla el viento que ondea los jirones de banderas blancas,

Enterradas entre cruces que no figuran en los nuevos mapas,

Recordando a los arboles rotos, sucios de humo, aun

En su muerte, parados, mirando, mudos testificando

El paso de la locura humana como antesala

De un reino de silencio y aire puro, novedoso

Donde las raíces se enredan en viejas minas, enterradas.

Y los gritos de terror se apagan ocultos por la maleza,

Donde las semillas vuelan nuevamente, lentas,

Sobre la tierra arrasada.  Y la noche, que ayer cortaban

Las balas trazadoras, se puebla de grillos y pequeñas garras,

Que diseñan refugios y trincheras, nidos nuevos

Sobre un colchón sangriento de latas abolladas.

Con la primera llovizna cantan las ranas…

Mientras un casco intacto, gota a gota, se llena

De reflejos movedizos de futuros renacuajos,

Y en el camino humea, nuevamente, brilla

Una pequeña esperanza, de inocencia uniformada

Luego amanece y a marchas forzadas

Las praderas derriban el eco de las balas

Borrando los sinuosos senderos de los tanques

Esperando el ataque de abejas y mariposas

Que acechan la retirada del rocío matutino…

Mientras la vida aguanta tenaz, sus lágrimas…

Y las pastosas cenizas fertilizan el campo devastado.

 

 

Plastificación

 

Cansado de ver sonreir, esta miserable juventud niña

Gastándose en rituales donde se visten de rebeldes

Como flores que no dan semilla, cuando sale el sol…

Doblan sus disfraces y se esparcen, donde la noticia

Fija el punto de reunión. Tan artificial, es su naturalidad

Tan gastada y vieja es… su marcha hacia la felicidad

Porque es siempre, una moda, la mentira y la verdad.

Pero se puede diseñar, un borde bien pulido al sol

De las luces desde el cual saltar… ¡mentiras, mentiras de hoy!

 

 

Espejos...

 

Desde el cielo quieto baja…

El reflejo de un ave

Sobre el agua mansa

De los charcos fríos

De una mañana nueva

Clara y nublada, inesperada

Casi como un regalo

Antes de llegar al verano.

 

 

En el tiempo

 

Embarcado en un viaje

Hacia afuera de mí mismo

Nunca empieza, nunca termina

Ni llega a ningún lugar.

Sigo sacando peso de mi mochila

Mientras el camino se aquieta,

El paisaje acompaña.

Todos los pájaros vuelan

Cuando llega la mañana…

 

 

De Idlib a Tal Afar

 

Quien dirá una palabra

Del hambre de los mercenarios

Desocupados cuando llega la calma

De la derrota sistemática, desgaste

De una pregunta quieta viajando

En la apenas curva trayectoria de una bala. 

Quien dirá aquí me quedo hasta que paguen

Las horas extras de los verdugos…

Los viáticos del zapador…

 

18 noviembre

Desestablecer

  



  Prendo la televisión y veo “publicidades”: publicidades reales en territorios lejanos, publicidades contra la guerra justificando los imperios, publicidades de hambre alimentando las corporaciones, publicidades de desesperación vendiendo nuevas religiones…

  Vivimos en un mundo diseñado por la propaganda, que nos mantiene pegados a una pantalla de teléfono, a la computadora.

  Viviendo virtualmente, disfrutando de la interminable compraventa de ilusiones escamoteadas con que se llena nuestro tiempo, o fabricando ilusiones nuevas con aromas de viejos venenos: porque todo lo que viene enlatado nos lleva a un dulce callejón sin salida que hemos aprendido a amar.

  No hay necesidad de represión en un sistema que ya ha cooptado los más lejanos rincones de la producción fabril, académica y cultural, no hay nada que no caiga en el formato cuadriculado de lo preestablecido por la teoría o por la contrateoría, sólo hace falta elegir para que todo sea igual.

  Nuestros caminos se abren a un mundo que nos acuna con miles de tentáculos que nos muestran adónde vamos pero no de donde vienen. 

  Podemos luchar y hasta salir a matar presidentes por el mundo, pero las balas dejaran su dinero a la misma fabrica que provee a los policías que nos dejaran aplastados contra el suelo, sea cual sea el país del mundo.  

  La globalización que absorbe culturas, derrama empresas, novedades, toxicomanías y alimentos neutros que garanticen el mal funcionamiento de la única máquina que realmente controlamos: nuestro cuerpo.

  ¿Hace falta rebelarse, acaso, para cambiar un formato esclavo por otro? Solo sería cambiar de sponsors, pero no implica recuperar nuestra vida, regenerar nuestra vida… 

  No implica que estemos del otro lado del problema, porque cada segundo de nuestra vida actual apuntala el mundo de mil maneras.  ¡Reciclemos esas botellas con este fabuloso pegamento! 

  ¿Es en serio? En la pendiente actual en que hemos encarado el futuro del planeta, la única opción es buscar formas reales de sacar los pies del plato…

  Queremos luchar contra el calentamiento global, pero lo propiciamos el día entero: no es firmando peticiones, ni lamentándonos, ni consumiendo alternativas comercialmente sustentables que viviremos un poco mejor.

    Ni siquiera, pondremos un pequeño freno a la destrucción “mundial” porque el mundo somos nosotros y nuestro mundo es el pequeño espacio que nos rodea…el pequeño espacio libre entre la punta de nuestros zapatos y el mar revuelto de la propaganda.

  Entonces… hay pocas opciones más que replantearnos, más que ser conscientes.

  ¿Podríamos plantar un árbol en vez de comprar esa hermosa agenda hecha en papel reciclado?

  Podríamos… ¿Podríamos plantar una lechuga, una sola, en la maceta que descansa seca contra la pared de nuestra casa en vez de indignarnos contra “Monsanto”? 

   Ciertamente que podríamos hacerlo… 

Podríamos desestablecer el formato de hipocresía, coerción y violencia con que nos relacionamos con los demás, en vez de esperar el último Best Seller de Osho, Cohello o Sai Baba?

  Podríamos… ¿Podríamos relacionarnos con niños y niñas en un plano de igualdad y respeto, en vez de espantarnos por las injusticias y la opresión del mundo?  ¡Podríamos,  y bien a tiempo!

… ¿Podríamos analizar un minuto nuestras necesidades reales, la forma en que domesticamos nuestra ansiedad con basura, antes que calcular cuánto tiempo nos llevara ganar el dinero necesario para mantener la ficción del consumo?  

  Podríamos, pero no tenemos ganas de administrar nuestra vida, de elegir por nosotros mismos, de hacernos responsables de nuestro metro cuadrado de existencia. 

  Solo quedan dos opciones, bajarse del tren en cualquier estación o tirarse en marcha, porque nadie va a ponerle un freno…

  Ya no hay destinos, solo postales, mientras viajamos a ningún lado para que puedan seguir fabricando rieles de frio acero a costa de nuestros horizontes…

07 noviembre

Nosotros somos ellos

 

 


  Corrupción, delincuencia, guerra, asesinatos, robos, estafas, crímenes ambientales, violaciones, genocidios, descuartizamientos masivos, esclavitud, tortura…

  Todo esto nos es ajeno, porque no somos nosotros quienes empuñamos el filo toscamente ensangrentado, quienes lanzamos la bala recta hacia su indefenso blanco…

  No somos nosotros quienes sonreímos sádicamente ante el alarido desgarrado en una bodega invisible y oculta en las afueras de la ciudad, quienes disfrutamos pisando huesos quebrados contra el suelo de tierra de la selva, ni aseguramos el brazo cansado de una preadolescente para que sea sometida por dinero hasta el fin de sus oscurecidos días…

  No somos nosotros quienes damos las frías ordenes de exterminio, acoso y tortura física y/o psicológica contra las molestas minorías, y ciertamente, no somos quienes las cumplimos… ¡Por favor! ¡¡Te pido que revises mi casa y compruebes que solo hay posters de caballos y barcos, osos de peluche, música clásica y almohadones…!!

  No importa, no hay forma de seguir mintiendo mucho tiempo más, de escapar a la dialéctica de la generación de la realidad, que pretendemos cada día disimular, esconder, afinar hasta lo imposible como si de una montaña pudiéramos hacer una aguja, para decir que el ultimo grano de arena en su cima tiene el mismo grosor que su base…

  Olvidamos, soslayamos, que la hoja nace del brote, que luego se hace rama, que hace cientos de años se descartó la teoría de la generación espontánea…

 Intentamos ocultar que no hay acción que no esté atada a otra acción, otra reacción, que todo es un camino, un trayecto, un transitar…

 Entonces… ¿Son realmente los ladrones los hijos adolescentes de mis vecinos, capaces de romper una o diez puertas a patadas cada noche para mantener su consumo de drogas baratas, terriblemente toxicas, que en un solo año los están dejando como muertos vivientes?

  ¿Acaso son los directores y primeros favorecidos de este espectral negocio?  

 No estoy tan seguro… aunque no faltaron ofrecimientos y ofertas de venganza: porque vivimos en un mundo que invita a la violencia permanentemente, que espera cada instante la oportunidad de descargar en los demás la tensión del sinsentido cotidiano, la esclavitud no forzada del consumo y la moda, que pagamos con nuestros mejores años atados al yugo ingrato del trabajo…

  ¿Robarían si nadie les comprara el producto de sus hechos? ¿Si nadie les encargara destruir la tranquilidad y la paz de sus vecinos para poder disfrutar de lo que ambicionan sin querer pagar el precio del esfuerzo cotidiano?

 Absolutamente, ciertamente: No.  Podríamos ver a nuestros demacrados aprendices de rateros pescando a nado en el medio del rio, o cortando el pasto con los dientes para conseguir su dosis, o cualquier otra cosa, pero claro, les damos una oportunidad bastante más fácil, más inocente para todos… 

  Ladrón es el que compra lo robado, de hecho, es el que produce el robo, y no hay forma de verlo de otra manera, porque sin su participación amable y santurrona, no hay robo que pudiera producirse… 

  ¿Hablamos de prostitución y trata de personas? Es la misma mecánica, quienes secuestran a una niña de once años para que sea disfrutada por macabros sádicos millonarios, es solo un subproducto de esta perversa forma de vida, tal vez, podría hacer una huerta en el fondo de su casa o criar gallinas dignamente si no tuviera esa posibilidad abierta de ganar dinero de forma espuria, violenta y dañina…

  Pero claro, todos los que mueven los hilos de las marionetas de la administración, la justicia y los medios de comunicación, tienen el dinero que recolectan de nuestros esfuerzos, en este sistema mundial que funciona exactamente al revés, y quien se animaría a contrastarlos con la mínima dosis de verdad, desnudar sus hipocresías, su feliz esclavismo… 

  No, por las dudas, culpemos al policía que disfruta de la picana, que participa activamente del narcotráfico, que vive del secuestro,  mientras dejamos libre al empresario, mientras seguimos consumiendo sus productos inútiles y nocivos.

  Sigamos lamentándonos de los indios que mueren pisoteados por caballos y camionetas sobre los mismos restos de sus chozas quemadas mientras admiramos al hombre de negocios que usurpa tierras y se ríe de todos, de todo, porque su seguridad está en la envidia colectiva que despierta su sonrisa siniestra y torcida… 

 Después de lavarse las manos, sobre las tierras usurpadas a sangre y fuego, pondrá a trabajar a hambreados esclavos semidesnudos, semianalfabetos, a los que seguirá intentando convertir en semihumanos para que disfrutemos en la góndola del supermercado de la oferta de la semana… en ese supermercado donde afanados asalariados intentan superar su sueldo de hambre y espanto a costa del desgaste de acumular horas y más horas de trabajo…



  Despreciemos al funcionario municipal que acepta el soborno, culpémoslo del caos del tránsito y hasta del estado de las calles…

 Somos formalmente acusadores y severos jueces hasta que nos para con su odioso silbato y caemos en la cuenta de que no teníamos todos los papeles en regla, claro, la culpa es de esta maldita e inmensa burocracia, pero extendemos nuestra disimulada mano, “toma pal asado que vengo apurado”.  

  Somos la corrupción, somos el daño que nos infligimos como sociedad.  Pero no nos importa, zafamos, seguimos en la calle sin preocuparnos de nada, podemos volver a alardear de lo mal que anda todo lo demás…

  Seguiremos culpando al gobierno, al intendente, al diputado que no pudimos llegar a ser, mientras buscamos la oportunidad de participar de alguna manera de sus turbios negociados, extender las manos al alcance de la generosidad de su corrupta fortuna, acunada a la luz de los delitos que elegimos no ver, no saber, no denunciar ni repudiar.

Callamos y sentimos, aprobamos con nuestro silencio porque podríamos perder el favor de nuestros correligionarios, de nuestros socios, de nuestra propia familia esperando una migaja cayendo de la ruidosa carreta que se roba el pan de la sociedad entera…

  ¿Es que acaso moriría una mujer cada día, por motivos banales, o por la terca y simple determinación de no creerse propiedad de nadie, si no hubiéramos criado a tres generaciones enseñándoles a festejar los chistes de la televisión, donde cada segundo se humilla a la mujer como persona, se la disminuye como ente social, se la estigmatiza como culpable anticipado de cualquier evento escandaloso, mientras se le da un lugar fantásticamente amplio como fuente de diversión, como juguete sexual, como propiedad privada del hombre que la mantiene y la paga?

  Sigamos siendo completamente hipócritas, histéricamente santos, apuntando para arriba, derramando nuestra santa indignación hacia afuera que es la mejor forma de perpetuar el asesinato cotidiano de nuestros propios hijos, aunque por favor, que sean los de los demás...

   Sigamos envenenando las relaciones más sagradas y encharcando el amor de barro hasta que no haya forma de volver atrás, sigamos festejando el precio barato de los botines de guerra hasta que un soldado patee la puerta de nuestra nación. 

  Sigamos practicando mentiras frente al espejo de la interacción social porque solo así, podremos decir, seguir afirmando “que tremendo que está el mundo, como se siguen matando todos” mientras nos declaramos inocentes, mientras seguimos buscando la salvación espiritual luego de la económica...

Sigamos olfateando el papel moneda que perseguiremos a cualquier precio, a costa de cualquiera, de cualquier cosa, territorio y ser vivo en el planeta…

  Sigamos de fiesta como si hubiéramos sido invitados.



 

05 noviembre

Contaminación

 




  Hace poco más de veinte años, un niño, un bebe que abría por primera vez sus ojos al mundo, podía tener en su sangre cerca de cien sustancias extrañas al ser humano.  Hoy en día, nace con más de 250 elementos extraños, trazas de nuestro estilo de vida, de nuestra relación con el planeta, de nuestro sistema de consumo, producción y logística: cadmio, plomo, zinc, arsénico, boro, cromo flúor, cloro… la lista es demoledora, no hay nada que no sea venenoso, toxico, mortal, que no esté en nuestra sangre antes del primer llanto…

  Pero no alcanza con eso, apenas dejamos la teta para que nos empiecen a envenenar con miles de alimentos diseñados para esclavizarnos, técnicamente adictivos, nocivos, que preparamos de una manera en que toda nutrición deja de estar garantizada, no terminamos de abrir los ojos para ser adoctrinados a través de miles de imágenes y pantallas en la conveniencia de destruir nuestro propio cuerpo, y después la sociedad y el resto del planeta.  

  Pero no importa, en eso va la convicción de que el planeta es ajeno y lejano, dibujando nuestro hábitat en perspectivas cerradas que conectan espacios estancos, donde solo vemos paredes y a lo sumo pantallas y pizarrones donde todo lo que debemos pensar y hacer ¿Lo que debemos ser? está predeterminado… Así pasamos del consumo de toxinas a la desnutrición, del estrés a la infección y de la contaminación electromagnética a la fiesta de disfraces permanente que es la interacción social. 

  Pero no nos importa, cientos de horas de propaganda nos han convencido de que el problema siempre está en otro lado, que la responsabilidad es de algún ser malvado y la solución vendrá de alguna entidad bondadosa, que todo lo que no vemos no nos afecta, que todo lo que nos afecta no podemos cambiarlo, y así hasta el infinito, pasamos día tras día trenzando los hilos que nos hacen bailar sobre los restos de nuestras posibilidades pisoteadas, de nuestros hijos inútilmente sacrificados a la banalidad.

  Pero claro, había que hacer algo, y como siempre, el sistema creo su vacuna contra la enfermedad de la conciencia que amenaza abrir nuestros ojos a lo que en realidad nos está pasando globalmente, e individualmente, como personas… 

  La realidad, es que hemos contaminado el suelo, el aire, el agua, y no hay forma de escapar a las consecuencias de nuestra ambición, más que reformular completamente nuestra relación con el planeta, nuestra relación con nuestro propio cuerpo… pero para evitar ese abanico de nuevos parámetros, se inventó el ambientalismo…

  ¿No? ¿Es que hay alguna agrupación ambiental que no esté diseñada y conformada por empresas, a través de su dirección, financiamiento, logística, etc…? No, porque el abanico entero de luchas ambientales se enfoca en la destrucción, al igual que los problemas que pretenden eliminar, y para eso no necesitan cambiar su estilo de relaciones, su mecánica de consumo, su diseño de la vida cotidiana, el resultado es la más pura hipocresía…

  Por supuesto, que si el problema es la contaminación y luchamos contra ella pareciera ser una causa noble, pero el resultado no vendrá de una guerra donde cambiamos sistemáticamente de trincheras, para poder representar una farsa, sino de dejar de proveer de municiones y pertrechos al enemigo que decimos combatir, centrando nuestra vida en el mismo consumo desmedido que agudiza el problema, en la misma enfermiza conveniencia y sed de poder que permite y predice el saqueo sangriento del mundo.

  Pero nos centramos en la despersonalización del problema, que nos deja pararnos a un costado para apuntar a las corporaciones, a las empresas, a los gobiernos, a la sociedad que comparte nuestro mismo formato y a la que sin embargo declaramos culpable para exigir nuestra inocencia…claro que en esta mecánica todos ganan (empresas, corporaciones, bancos y conglomerados económicos) menos la sociedad como agrupación de personas que pretenden vivir mejor…

  Entonces, llegó la hora de dejar las caretas a un lado, antes de que sea tarde, y dejar de aportar a la destrucción sistemática de nuestro entorno invisible, dejar de vivir a través de las pantallas, donde luchar por el planeta equivale a… ¡¡¡¡Firmar un petitorio virtual…!!!! 

  Nos toca hacernos cargo de que cada paso en nuestra vida se da en un único planeta, absolutamente redondo, no hace falta luchar por él, que es mucho más grande que nuestras expectativas y omisiones, nuestras acciones y deserciones, y empezar a reelaborar el significado de nuestra coherencia, antes que sea permanentemente tarde, completamente inútil… 

Cada segundo nos sumamos a la destrucción, pero podemos plantar una lechuga entre dos baldosas, cuidar un árbol más que en el simbolismo inútil, hasta que podamos decir que hemos dado un árbol al mundo, en vez de jactarnos de que alguien está talando la amazonia…mientras nosotros nos oponemos.

  Podemos dejar de alimentar y multiplicar mascotas hambrientas y dejar que se exprese libremente la naturaleza en algún infinitamente pequeño reducto de nuestra “propiedad”… La extinción viene del cemento que amamos, de nuestra escala de atribución de valor variable a los seres vivos, de las pantallas que glorificamos, de la injusticia que toleramos para no tambalearnos en esta cornisa…

  Podemos caminar en vez de subirnos a un auto en vez de consumir, ingerir, respirar y cagar petróleo, cada día de nuestra vida, tenemos un millón de maneras por segundo a través de las cuales podemos ser lo que decimos ser cuando nos ponemos de este lado gloriosamente inocente del mundo… pero no lo hacemos.

 La jugada es nuestra, pero mediáticamente indignados, acunamos a nuestros hijos predilectos como Bayer y Monsanto, protegemos a los Bancos y su eterno drenaje financieramente homicida, ecocida.

  Exigimos nuevas formas descartablemente asépticas, instantáneas y baratas de vivir y relacionarnos, nuevas adicciones que nos garanticen escapar de nuestra propia forma de pensamiento autodestructivo, nuevos productos que nos permitan darle utilidad a la pérdida total de sentido en que nos abocamos para poder generar los medios con que los adquiriremos…

  No importa, alguien respira tranquilo, la contracara mundial de la esclavitud es la depresión, todos los negocios están protegidos por nuestra mentira.  Todas las guerras del mundo proseguirán para simular nuestra felicidad…

 

 

02 noviembre

Desde la oscuridad

 


  Sueño, despierto, camino o me quedo quieto, como o no como, vivo, permanezco, miro o soslayo, hago o deshago, duermo…o velo.

  No tengo, casi, puntos de contacto con la sociedad actual, lanzo garfios para trepar al futuro como anzuelos sin filo, que sueltos se pierden en el remolino lento del tiempo sin pegar en ninguna pared porque no hay encierros ni prisiones que no sean imaginarias. 

  Vivimos en una reclusión mental voluntaria, en una aceptación constante y perfecta de lo imposiblemente ridículo, como es el panorama de persecución actual de valores espurios, baratos e  insulsos, que carecen de mayor función practica que recolectar el poder personal, la voluntad de cada ser humano para su inútil desperdicio.  

  Y así nos convence cada minuto la publicidad exacta, personalmente diseñada, para concentrarlo y repartirla entre corporaciones e ideologías que intentan con éxito variable, día a día destruir todo individuo en favor de las corporaciones, y -en pos de la libertad del comercio- toda forma de vida y conciencia a nuestro alrededor...  

  La ecuación es sencilla, cambiamos alegría por sonrisas gastadas, felicidad por adicciones, convicción por fanatismo, y conciencia universal por capsulas virtuales de fe…actualidad por televisión, salud por temor a la muerte violenta.

  Sin embargo sigue cayendo la maravilla de la lluvia, sigue reinando sin rivales el imperio del sol, y después de un siglo entero perfeccionando bombas, no se ha logrado inventar un cohete o dirigir una fuerza que tuerza el rumbo del más pequeño planeta, entonces ¿cómo hemos logrado tomar tanta distancia de la realidad?

  ¡Es el sistema, idiota!  Ah claro, eso, si, me suena conocido… Sistema es cuando trabajamos cotidianamente para poder ser esclavos voluntarios por un rato, cuando los pocos que tienen el poder real, organizan colectas permanentes para regenerar sus propios recursos a costa del hambre y la miseria de todos los demás, a través de la coacción, claro, del abuso sistematizado, legislado, bendicionado. 

  Sistema se le llama a la entrega alegre a una maquinaria de  imponer sentidos, perspectivas y agendas, cuando desde cada ser humano se enfoca la divinidad que nos rodea como algo externo y concentrado destinado a dirigirnos hacia la deconstrucción de nuestra propia capacidad de conexión con el universo, cuando se le llama perfección a el roce suave de dos engranajes de acero en una máquina de matar…

  Ya sé cómo funciona todo, he logrado asomar la nariz como un pez asoma la suya a la concha de una caracola vacía, solo para retroceder aceleradamente mientras los arpones hambrientos burbujeaban furiosos a mi alrededor… 

  Ahora sé que están siempre acechando, como hienas para consumir mi conciencia, para desestablecer mi propia visión interna en favor de un mundo rutinariamente oscuro sin ninguna fantasía, donde cambiaran mi esencia y mi tiempo por objetos y sentimientos estandarizados, mis ojos por posters bien iluminados, mis brazos y piernas por elaboradas excursiones hacia ningún lado, y la totalidad de mi piel por caricias a una pulida chapa de colores metálicos… 

  La verdad que no, me es difícil mover un solo pelo en esa dirección… aunque el precio sea el estigma permanente siempre renovado, el asedio ideológico, el cerco por hambre, frio y miedo, y la costumbre de ver mi propia sangre corriendo…

   Sin embargo nunca falta alguien que grita: ¡Guarda! ¡No te pierdas la secuencia, que ya es hora del próximo escalón a ningún lado!  

  Y así criamos a nuestros hijos, a nuestras hijas, “p'al gancho” de esta posmodernidad helada que no supimos navegar, para los restos de nuestro desenfreno industrializado, de esta factoría de omisiones sesgadas con que justificamos la fraguada muerte de los otros con nuestra no-vida real, nuestra vida de cementerio de cemento, de silencio en altavoces de interminable, infinita propaganda…

  No importa, se puede ver flameando la bandera a cuadros, la línea de llegada, tanto esfuerzo tendrá su recompensa cuando la meta esté a nuestro alcance, finalmente, y escapemos del cardumen de tiburones que siempre nos persiguen en esta pecera superpoblada…voy a conectarme a la pantalla, quiero saber cómo vivir, que voy a pensar mañana…

 


28 octubre

¿Por qué decimos “Nadie Menos”?

 

  

  En un mundo que se basa diariamente en la opresión la explotación y la injusticia, decir “Nadie Menos” como si tuviera sentido, es algo que no tiene ningún sentido, porque si hay algo que no podemos hacer al día de hoy es dar un paso más hacia el abismo, ni siquiera hacia el abismo simbólico de la ausencia de sentido. 

  Es asumir sin decirlo que la furia se aceptaría si fuera la de William Wallace, que la astucia seria valida si fuera de Robin Hood, que la inteligencia seria bien vista si partiera de la mente brillante de Favaloro… pero ¿Ni una menos? ¡Por favor! ¡Si hay igualdad que sea para todos! ¡Andá a hacerte coger a ver si se te pasa…!

  La diaria construcción permanente de lo establecido, el formato del mundo en que hemos sido moldeados nos impone y a la vez nos impide ver las cosas como realmente son: “Nadie Menos” es decir que solo hay excesos, que solo hay excepciones, que la base esta, está bien, que vamos bien, y en ese barco de papel higiénico ideológico podemos navegar, pero no…

  “Claro, te entiendo, pero yo soy contador, y trabajo cada día, pago mis impuestos y…”…No, no… Cada cual desde su puesto, desde su posición estática en la vida, debe hacerse cargo de lo que está generando día a día como parte de la humanidad, porque los números que dibujaste hoy para ganarte tu sueldo pueden haber matado una familia entera en la soledad indefensa del campo, en un lugar que no ves, en un mundo que no te afecta su permanencia o desaparición.  

  Estás cambiando vidas por números en la banquina del sentido del discurso, donde se tiran todos los cadáveres que molestan: en forma de palabras malsonantes que se evitan, de verdades incomodas que se ignoran aunque estén a la vista, de construcciones semánticas completamente hipócritas que se deslizan silenciosamente sobre las ruedas aceitadas de la automanipulación social.


 ¿Es que estamos luchando acaso por los niños que cada día dejan de lado su necesidad de amor para seguir intentando crecer y sobrevivir en un sistema que degrada –como norma- al ser humano? ¿Es que estamos luchando por poner un grano de arroz en el estómago achicharrado como una pasa de un hombre de cuarenta años muriendo de hambre silenciosamente en la puerta de su casa vacía, en algún rincón de África, Luxemburgo, Dinamarca o Hurlingam? 

  ¿Es que también nos preocupan sus hijos, su mujer y sus perros? ¿Es que nos importa el obrero que cuela el acero en el crisol mientras aguanta la tos que lo está matando, con sus pulmones y sus venas llenas de la última aleación que el mercado de la industria barata, descartable encumbró? … Ciertamente: no. 

  Pero parece muy adecuado y heroico dar un paso más allá en la conciencia colectiva que apenas se vislumbra en una tibia toma de posición inofensiva, para equipararse con Gandhi, Jesucristo y Buda, y luchar por la paz y el bienestar universal a través de la simple enunciación de un eslogan vacío de dos palabras….

  Una chica que venía de otro país, como se cuentan las cosas los viajeros, en esa catarsis de una noche frente al fogón, me hablaba de alguna situación incomprensible, tal vez inaceptable, y de cómo sólo sonreía y seguía adelante, y me lo explicaba en cuatro palabras que son una forma de definir el peso ya insoportable del mundo: “soy mujer, puedo hacerlo” definiendo la última opción posible frente a la opresión y el abuso.  

  La simulación como el último reducto que nos permite mantenernos vivos sin ceder lo único que podemos resguardar, la necesidad innegociable de permanecer, tal vez para seguir luchando, el fuego interno que brilla bajo las cenizas de nuestra propia piel degradada por el látigo y los insultos… 

  Cuando nada resta, la trinchera se arma en la rebeldía que queda en la conciencia de ser y saberse humano, que simula pero no acepta, que obedece pero no siente, que participa pero miente, y llora a través de símbolos y canciones, de un mundo de miradas hacia adentro y estrellas invisibles a la luz del día…

  Como los antiguos esclavos que ponían la cuña en el engranaje, hoy en día, cuando la dinámica entera del mundo actual se apoya en una mitad exacta de la humanidad puesta por encima de la otra, luchar por la igualdad más básica que podemos usar como construcción de un mundo nuevo es un acto reconstructivo de múltiples cimientos.

  Mientras tanto, decir “Ni una menos” es tan fácil como declararse como denunciante en contra de la esclavitud, mientras no dejamos de buscar la oferta manufacturada por mano de obra esclava en un país lejano que tal vez dista de nuestro hogar no más de cuatro o cinco cuadras…pero sirve.  

  ¿Sirve? Así, de la misma manera que diríamos “calma la sed” como actores en una publicidad de gaseosa, no se si sirve, pero por algo se empieza, y un día las palabras que decimos mueven algo más que nuestra lengua…

  Pero decir “Nadie Menos”… ¡Nadie menos! ¿Denserio me están hablando? Cuando cada faceta de la vida actual -sin excepciones- se basa en el flagrante pisoteo constante de derechos personales, en la discriminación, el exterminio selectivo y el racismo, en la invasión y la guerra de conquista, pretender que vamos a avanzar sobre las ruedas de nuestro propio cinismo, hipocresía y falsedad es equiparable a suspender al  amanecer para prender un foco…

  Pero hay un solo momento mágico del día en que podemos mirar el sol cara a cara y subirnos a su fuego ascendente, sentirnos iguales y no inferiores a cualquiera, porque por segundos no hay forma lógica ni científica de negar que estemos hechos de la misma materia.  

  Solo cuando logramos imponer en nuestro corazón el miedo a la oscuridad, amamos el ocaso de una luz que se apaga, que nos hace refugiarnos, temer y pagar tributo a los dueños del candelero, para sentirnos seguros, y confiar en un camino ciego, esperanzados en que nos lleve a un nuevo amanecer que, indefectiblemente, empezará sin la presencia de los necios y los tibios.

  En el camino, a través del firmamento del abanico interminable de opciones que descartamos diariamente, se da la lucha y el asedio renovado de las plazas inmensamente amuralladas, el ataque suicida del esclavo encadenado hacia el capataz de la factoría, el salto total hacia una nueva conciencia… Mientras, el planeta gira, espera…



20 octubre

Cartas en blanco (poesías)

 

 


 

Retaliación

 

Tu temor de siglos y la oscuridad

Que toca a la puerta y avanza sin esperar

Quebraron los antiguos puentes

Por donde podrías volver a ser…

Volando a ciegas hacia el centro

De un infinito mundo de piedra

Donde no hay nada que crezca y nada que cuidar

Tu ceño fruncido se gasta sin llegar.

Cuanto humo y cuanta niebla, y cuantas nubes…

Forman deformes fantasmas que ríen

Rayando de oscuras carcajadas el cielo azul

Pintando de negro las estrellas y la luna.

Pero el sol es más grande y está tan lejos

Que sus rayos algún día llegarán corriendo

Para hacer de las lágrimas que no dejaste caer

Un surco de colores vivos, frescos…

Y cuando la tormenta anunciada llegue

Tu cuerpo entero será una semilla latiendo

Que de los viejos dolores haga tiestos

Donde poder acariciar a un hombre nuevo.

Y de las fachadas grotescas, que cayeron

Mirar las ventanas comidas por la hierba

Para no olvidar que todo estaba, ahí, cerca,

Quemándose frente a un corazón de hielo.

 

 

Globalización                                                                

 

La violencia como una forma de amor

La ignorancia como un camino a la felicidad

La mentira como una herramienta neutral

La indiferencia como una táctica lenta

El factor sorpresa de no tener bandera

Ni ideologías que defender del lucro

La esclavitud como un ideal, para los demás

Y grandes rebaños de indignados buscando pasto

Misiles de colores y posters de héroes muertos

Y el amor por la libertad que nos dibuja el cine

Ser feliz es… despertar para poder consumir

Estar vivo es convertirse en un producto…

 

 

Engranajes actuales

 

Inútiles perfectos, caminando

Burocráticamente hacia su destino,

Prefijado por el universo

Que pueden mantener los tanques

De guerra pisando sembrados…

Por hoy no hay nada que revisar

Toda la maquina esta aceitada

Corbatas al tono de la reunión

La santa muerte preside siempre:

Si algo falla fabriquen dinero

Maten lo que no se pueda comprar

Construyamos un arca para los banqueros

¡Y para los suicidas muchos rascacielos!

 

 

En el futuro

 

Dejándome acariciar,

Cuando no esperaba tanto,

Me enamore de una terrorista…

¡Pero, subió a su avión!

…Hay muchas torres que voltear.

Tal vez la busque la policía

Del pensamiento, por saltar

Los muros de su limitación

Tal vez la masacren día a día

Con la social convención

O intenten maniatarla

Con sus tensos prejuicios

Tal vez se esconda tras las sombras

A peinar su corazón lavado

Tal vez sea tanta valentía

La que envasa su sonrisa

Que sólo renuncie a la guerra

Que sólo llore de amor…

Lanzando semillas bajo la lluvia

Mientras dibuja en los muros

Mientras diseña en el aire

Con la punta de sus pies

Mientras recuerda la llama

Que junto a mi encendió…

 

 

Doble rasero

 

Noticias que entristecen, en la televisión

Noticias invisibles todo alrededor

Luchando por la vida, la paz y el amor…

Hasta cerrar la puerta, porque así es mejor.

Un grito de justicia, una plegaria a dios

Y cuando nadie mira volvés a ser vos…

Un día más de lucha en la red social

Por ahí no vayamos, no me quiero embarrar…

¡Yo daría todo lo que tengo para dar!

¡Ah, llego la hora! ¡Me tengo que marchar!

Sufriendo por los pobres, y la desigualdad

Todas las injusticias voy a convalidar…

Quiero un mundo nuevo, que sea para todos

Pero en el medio un muro para no verlos más.

Llorando por ballenas y esos pobres yacarés

Casi piso al mendigo… ¡Lo tuve que saltar!

Somos todos personas ¡Que viva la igualdad!

¡Por dios! ¡Ahí viene un traba, que no mire para acá!

Me piden coherencia… ¡Qué barbaridad!

¡Me la hacen tan difícil! ¡Ya no quiero pensar!

 

 

Visión del fin del mundo

 

¿Realmente creemos que…?

¿El agua brota de un caño?

¿La electricidad nace de un cable?

¿Los alimentos llueven sobre las góndolas?

¿La realidad es el reflejo de una pantalla?

¿La sociedad está organizada?

¿El dinero es tan necesario?

¿Amamos la autoridad?

Estamos acostumbrados mecánicamente

A pensar estructuralmente

Según juicios de valor auto promulgados

Por los tiranos que fabrican esclavos…

Pero un día nos damos cuenta que…

Si atrás de todo hay un motor

Somos nosotros el combustible,

Mientras navegamos hacia afuera

De nuestra propia realización…

No hay un bozal que nos impida ser

Ni mascoteros que nos rescaten…

Cada segundo y cada elección,

Son decisiones de un nuevo mundo…

O no, tal vez, solo podamos elegir,

De forma rutinaria, como dejarnos mentir.

 

 

¿Podría ser?

 

Sexo sin poder

Amor sin prisión

Amistad sin motivos

Música sin radios

Imágenes sin tv

Libertad sin doctrina

Placer sin química

Muerte sin deudas

Liderazgo sin mentiras

Verdades sin tinta

Nación sin guerra

Arte sin ego

Orgullo sin sangre

Lucha sin vencedores

Danza sin metáforas

Oscuridad sin noche

Objetos sin precio

Ventaja sin malicia

Belleza sin culpa

Futuro sin miopía

Luz sin reflectores

Imaginación sin esquemas

Alimento sin veneno

Mar sin cargueros

Niñez sin diseño

Sociedad sin control

Vida sin represión

Comunión sin violencia

 

 

Viajeros…

 

Viajando, asombrados, como niños…

Que se encuentran en el parque

Y se tiran de la mano, desde el tobogán

No hay pasado, el futuro ahí esta

El presente no reconoce engranajes

Ni chimeneas de la era industrial…

Entre recuerdos de canciones y palabras

Las sonrisas solo producen felicidad

Y antes de partir una infusión de hojas

Del bosque donde nacemos al lobo

Que deja de cuidar el rebaño

Y un abrazo al mundo en las costillas

De los hermanos y hermanas que siguen

Buscando… llegando un día a sí mismos…

Entre tanto cable y tanta máquina,

Desde el corazón, renacer…

Despintando el viejo mundo

Con nuevas miradas…

 

 

Mirando al costado

 

 No somos los mismos

Que un día cruzo el destino

Para enseñarnos a  buscar

La respuesta en el centro

De nosotros mismos

 

 

Desertificación programada

 

¿Porque entraste a mi patio tan en puntas de pie?

…ofendiendo a los pastos que duros beben el sol

¿Acaso temías despertar a alguien? ¡Si todo esta alerta!

¿Acaso temías lastimar? ¡Pero todo es fuerte en su fragilidad!

¿O que corte el hilo de tus prejuicios, un lugar que no se puede comprar?

En un reino sin sonrisas no hubo trono que pelear

Ni bufones que rindan culto a tu imperio de la soledad

Un mundo de palabras sin decir, termina en pensamientos ciegos

Que avasallan la realidad, como malezas que riega la lluvia negra

Pero un potro sin riendas no pisa en falso al saltar

Ni galopa contra el viento solo para dejar huellas

Encaja las patadas entre las costillas, con rabiosa felicidad

Pero en la tormenta se luce, arrullado por los truenos…

Porque estar vivo es un lujo, que no todos pueden pagar

                                                                                                         

 

Individuos

 

El mundo sigue siendo el mismo

Donde ayer se puso el sol

Pero de tus esperanzas quietas

La luz empieza a brotar

Entre retazos de piel

Entre capas de hojas muertas

Al lado del camino, temblando por el eco

De las botas de los nuevos soldados

Que no se gastan en romper lo pequeño…

Y la primavera interna lucha

Por vencer al invierno nuclear

Aunque de sus dientes goteen

Todas las mentiras que estamos

Dispuestos a escuchar…

Siempre, nuevamente.

 

No se puede matar la esencia

 

¿Cómo asesinar un árbol de raíces invisibles?

¿Qué a falta de sol absorbe las estrellas?

¿Qué a falta de luna consume el reflejo…

De las gaviotas nocturnas en las olas del mar?

¿Cómo secar un tallo que se alimenta de magia?

¿…Que ríe en las tormentas, acunado por los truenos?

¿Que llora en plena seca: de laboriosa felicidad?

¿Cómo exterminar un estallido constante

Que se multiplica lentamente con ferocidad?

De cada yema nacen universos de fuego

Que desafían el mito del viejo Big Bang…

¿Cómo capturar al viento que recorre desde siempre

El tiempo y los días que van a llegar?

¿Cómo enjaular el aire que todo rodea?

Infectando tus pulmones a gran velocidad

Con la vida que desprecia los listados

…Con su espíritu de eterna libertad

 

 

Valores invaluables

 

¿Qué valor tiene la vida…?

¡Por favor!

Que intrascendente

Morir mañana

O la semana pasada…

¿Todo lo que te importa,

Es que no se sequen tus ojos

Abiertos contra el cielo?

¿Qué valor tiene la vida

Sin libertad, sin conciencia

Sin intentar comprender

Que estamos conectados

Con todo lo demás…?

¿Somos felices más que en la postal

Que dibujamos para otros?

¿Somos más libres que la sonrisa

Que calca el estándar social?

¿Somos capaces de caminar libres

Donde las sonrisas y las miradas

No se regalan… o se regalan?

¿O de clavarnos al lugar gastado

Donde recibir un mundo armado

Sobre los huesos de los demás?

¿Qué valor tiene la vida

Si no salimos a caminar?

¿Si recolectamos prejuicios

Como una forma de despertar?

¿Sin bailar en las cornisas,

Que sol puede ser real?

 

 

Cada día de guerra…

 

Vivir en guerra es así

Caer destrozado, en pedazos,

Con la cara contra el barro

Solo para salir de una situación

Precaria.  Para pasar a otra igual

O más precaria, pero un poco

Más favorable, donde…

Esconder la cabeza para seguir tirando.

Vivir en guerra es así

No hay rencores sordos ni ese odio ciego

De las películas, solo tensión total, cotidiana,

Solo se mata para avanzar

O defender un puesto ¿Que otra hay?

Vivir en guerra es así

Y avanzar aceleradamente

Hacia la mutua destrucción indiferente:

Aniquilar es la sonrisa perfecta

Bajo el bombardeo, te hacen más fuerte

Vivir en guerra es así

Un mar revuelto de mentiras

Para que apuñales a tu hermano,

Antes que quebrarte llorando

Antes de acariciar un pájaro…

Vivir en guerra es así

Cada vida es tan sagrada

Que se toman prisioneros

Solo para poder negociar

Las armas enfundadas, cara a cara.

Vivir en guerra es así

Tan simple que espanta

Montañas de escombros y una lata

De almuerzo y cena cada día

Y dedos como garras de aferrar el gatillo,

(El alma encerrada en una frágil tinaja)

Vivir en guerra es así

Podría terminarse mañana

Si el enemigo se retirara caminando

Si no pensáramos distinto

Si no lo definieran las armas

Si este mundo alcanzara

Para toda la humanidad…

Pero vivir en guerra es así

Luchar para que otros calculen

La forma de acumular rentas

Sobre territorios cautivos

Sobre llanuras desiertas

Sobre valles ocupados

Por peces gordos como pirañas

Porque vivir en guerra es así

Miles de civiles cansados

Inclinando la balanza, un día

Coserán una bandera blanca,

Porque ser esclavo no es la meta

Pero a veces sí,  el final, al fin…

Porque vivir en guerra es porque si

Porque grandes negocios necesitan ser…

Porque el dolor ajeno sirve para presionar

En cuarteles generales donde reina la humedad

En oficinas donde el olor acre de la pólvora

No se conocerá, mientras la vida

Es solo un número más…

 

 

Sociedad garantizada

 

Todo lo que esta mal es bueno

Todo lo que mata se cria

Todo lo oscuro se ilumina

Todo lo lleno rebalsa

Todo lo frágil se mata

Toda mentira se cree

Toda injusticia se riega

Todo lo vivo se enjaula

Todo lo muerto se idolatra

Todo lo inútil se encumbra

Todo lo perverso es ley

Todo el dolor se ignora

Toda violencia se reverencia

Toda miseria se oculta

Toda injusticia se imita

Toda libertad se aplasta

Todo amor se persigue

Toda la paz se embarra

Toda guerra es dinero

Todas las leyes renguean

Todo lo que nace se acosa

Todas las sangres son rojas

Toda persona es un blanco

Todo tiempo es del reloj.

Felices e Incapaces

  Bueno...   Siempre es un problema conocer a gente importante.  Y es un problema porque la gente importante tiene problemas importantes... ...